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a memoria que Freud nos
pro-pone, lejos del modelo médico y de
la ciencia de las “profundidades”, está
presentada por esquemas espacia-
les, como por ejemplo el modelo del
peine, es decir, esquemas de lugares –
tópicos-.
Jean P. Clero nos dice en
Las
razones de la ficción
, que el lugar es
separable del cuerpo. El lugar se defi-
ne por ser lugar de algo y pone en
relación cuerpos unos con otros. Al ser
relación, no es cosa en sí misma.
Lacan se diferencia de Freud en
tanto no presentará su escritura bajo el
“modelo”, sino bajo presentaciones to-
pológicas que actualizan lo irrepresen-
table (nudo borromeo, botella de Klein,
toro, Banda de Moebius, etc.). La topo-
logía no es representación de la rea-
lidad en continuidad con Freud, es es-
critura.
Siguiendo esta línea, Deleuze
plantea en
Crítica a la Clínica
, que una
concepción cartográfica es muy distin-
ta de la concepción arqueológica del
psicoanálisis. Lo arqueológico indaga
por capas, es una concepción memo-
rial. Los mapas, al superponerse, per-
miten el pasaje de uno a otro; esto
implica no la búsqueda de un origen,
sino de una evaluación de los despla-
zamientos.
En la clase del 19 de mayo del
65 del
Seminario Problemas Cruciales
,
Lacan nos dice que el sujeto entra co-
mo objeto deyecto de lo que se jugó en
otra parte, de donde ha caído de la
escena de sus padres. Esa Nada se
pone en juego e implica una apuesta.
Un acto al que el sujeto se entrega.
Todos somos jugadores, todos esta-
mos comprometidos. Al jugar al juego
perdiendo, gana. Ya había dicho en el
Seminario 5
“gana el que pierde”.
A continuación, propongo articu-
lar un fragmento de trabajo analítico
con una paciente que atendí en el
hospital hace muchos años. La llamaré
Belén. Ella consulta alrededor de sus
15 años de edad.
La apuesta es al sujeto, a la ins-
cripción en el segundo tiempo de la
estructura. Operan en este tratamiento
trasferencias laterales de trabajo con la
psiquiatra, el equipo de AT, la Direc-
ción de Infancia y operadores del ho-
gar en el que vive.
¿Se trata de intersecciones dis-
cursivas que “atrapan” un mismo cuer-
po?
Ubico tres tiempos que ordenan
distintos movimientos de este trata-
miento:
1. Marcas que no marcan pero llaman
La mamá de Belén la abandona
a los pocos meses de nacer. Queda al
cuidado de su padre, un hombre muy
mayor, quien un par de años después
fallece de cáncer de pulmón. Vivió lue-